domingo, 23 de junio de 2013

De Cuando Naoko creció y ya no era ella.

Despertó sintiéndose extraña, se levanto y camino hacia el espejo para mirarse. Ya no era aquella chica con el cabello rosa, ya no era esa niña,  ahora en cambio se veía un tanto mas flaca, un palmo mas alta y  su cabello era largo, rojo como el fuego. Su mirada no era la misma, ni tampoco lo que vestía. ¿Tatuajes? la ultima vez que miró no estaban ahí. Se sintió extraña, como vacía y también observada, al darse la vuelta encontró una niña de unos quince años, sentada con las piernas cruzadas sobre la cama. Ella si tenia cabello corto y rosa. La miraba y sonreía.

- Hola! - soltó sosteniéndose los tobillos.
- Hola... quien eres tu?
- Vamos, no seas tonta, mírame bien.
- Bueno, si se quien eres, pero me parece imposible...
- No, lo es - La interrumpió.
- Pero entonces que pasó, como pasó esto?.
- Pues, creciste, o creíste que toda la vida serias la misma?
- No, por supuesto que no- se sentía tonta y como en un sueño.¡Eso era!, era un sueño.
- No lo es- canto la del pelo rosa , saltando en la cama.
- No es que?
- No es un sueño.
- Yo no dije eso en voz alta.
-Lo pensaste y puedo saber lo que piensas.
-Como puede ser posible tal cosa?
-Pues soy tu y tu eres yo. Entiendes?
-No, no entiendo.
-¡Ash!, es verdad lo que dicen, una se vuelve aburrida con la edad.
-No es ser aburrida, solo quiero, necesito una explicación.
-Ya te la di: creciste y ya ¡duh!
-Arrrgh, pues si crecí y  tu eres Naoko, quien soy yo?
-Eso depende de ti.
-Pero ahora cual es mi nombre, no puede solo seguir siendo Naoko.
-Puedes llamarte como quieras, pero olvida el Alicia de una vez, la chica que vive con el conejo al otro lado del espejo ya lo tomo y solo se permite una Alicia por sector, de lo contrario todo seria un caos.
-Que?, como es posible tal cosa?
-Solo lo es, son reglas.
-Son incoherencias.Y ahora que haré?
-Pues, lo mismo, escribir - dijo bajando de la cama y sacando una larga pluma color turquesa del bolsillo, para luego ponerla en la mano de la pelirroja.
-Como puedo seguir escribiendo si ya no soy yo...?- Se pregunto mirando la pluma en su mano.
-Si lo eres. ¡ush! que terca.

Volteó hacia el espejo mirándose fijamente, pensando, preguntándose, tratando de entender aunque fuera solo un poco.

-Sigue mirándote al espejo, no cambiaras... -dijo la niña sentándose de nuevo en la cama - no tienes que dar con un nombre ahora,tienes tiempo, solo trata de empezar.
-Pero... por donde?
-Ya te dije que es cosa tuya -Rezongó molesta.
-Al menos estarás aquí para ayudarme, supongo que eso es algo.
-¡Hey! y a ti quien te dijo que yo me iba a quedar? acaso crees que no tengo algo mejor que hacer?
-Pero...
-Debes averiguarlo tu misma, como lo averiguaste cuando eras yo
-No vas ni siquiera a darme una pista?
-Pista?, crees que esto es un juego o que ya esta planeado?.
-Emm bueno, no, pero, tu eres yo, yo soy tu, debes tener alguna idea de como me llamarías ahora.
-No necesitas un nombre para escribir, escribe y tu nuevo nombre llegara a ti. Ahora debo irme.
-Tan pronto?
-No te dije que tengo cosas que hacer?
-Oh... bien...
-Supongo que nos veremos después.
-Si, nos veremos .... en algún momento, pero nos veremos. -Se levanto de la cama y camino hacia la puerta, volteando hacia la de cabello rojo una ultima vez.
-Sabes, siempre supe que mi apariencia cambiaría, pero... no esperaba ser una chica de cabello de fuego, me sienta bien... -soltó despreocupada -en fin, adiós.- Agregó levantando los hombros, guiño el ojo y desapareció. dejando la habitación en silencio, no vacía como al principio, solo en silencio, dejando sobre la cama, un cuaderno nuevo, un tintero mas grande y abierta la puerta hacia otro camino.

jueves, 20 de junio de 2013

Desvario #2 - Refugio

Mi refugio antes era cálido, grande y hermoso.
Con el tiempo se volvió el lugar perfecto.
Algunas veces olía a cigarro y otras veces olía a manzana.
Ahí pase mucho tiempo, mas del que creí y no vi pasar.
El tiempo pasa volando cuando uno esta bien.
Me sentaba entre el y no había mejor lugar.
Allí en medio de su calor; leía , dormía, jugaba, comía y aveces, también, me volvía loca y no quería parar.
Pero Vinieron varias tormentas e intente reconstruir lo que se destrozo.
aun lo intento, al menos no muero de frió, pero la magia que había dentro de el,con el viento voló.
Solo un poco me quedo...la guardo bien, dándole tiempo a que cresca de nuevo y todo vuelva a su lugar